Leche para niños pequeños: una guía

Durante el primer año de vida, los bebés prosperan con la leche materna, la fórmula o una combinación saludable de ambas. La lactancia materna puede continuar después de la edad de 1 año, pero los bebés que son alimentados con fórmula dejan de necesitarla en su primer cumpleaños. Este es el momento perfecto para hacer la transición de tu bebé a una leche apropiada para su edad.

La cantidad de leche disponible en la sección refrigerada del supermercado podría ser suficiente para confundir a cualquiera. Estamos aquí para resolver el dilema del pasillo de los productos lácteos: aquí está todo lo que necesitas saber sobre cómo darle leche a tu niño pequeño, simple y llanamente.

Beneficios de la leche para los niños pequeños

Aunque no están creciendo tan rápido como cuando eran bebés, los niños pequeños todavía tienen mucho que desarrollar. Los niños pequeños tienen una gran necesidad de una buena nutrición para su salud y bienestar. Si sus necesidades no se satisfacen con una dieta bien balanceada, pueden enfrentar desafíos de crecimiento, retrasos en el desarrollo, deficiencias de nutrientes y resfriados frecuentes. La Academia Estadounidense de Pediatría afirma que las mejores bebidas que pueden beber los niños pequeños son el agua y la leche de vaca.

La leche de vaca está repleta de beneficios nutricionales y proporciona suficientes calorías, grasas, proteínas, calcio, vitamina D, vitamina A y potasio. Una taza de leche entera contiene:

150 calorías

8 gramos de proteína

8 gramos de grasa

306 miligramos de calcio (43% del valor diario para niños pequeños)

96 unidades internacionales de vitamina D (16% del valor diario para niños pequeños)

80 RAE de vitamina A (27% del valor diario para niños pequeños)

374 miligramos de potasio (18% del valor diario para niños pequeños)


¿Cuánta leche necesita mi niño pequeño?

De 1 a 2 años, los niños pequeños necesitan de 2 a 3 tazas o de 16 a 24 onzas de leche entera por día. Cuando tu pequeño cumpla 2 años, está bien cambiar a leche descremada o light, siempre que su pediatra no tenga preocupaciones con respecto a su crecimiento. De 2 a 3 años, los niños pequeños necesitan de 2 a 2.5 tazas o de 16 a 20 onzas de leche descremada o al light al día. Si los padres les dan a los niños pequeños más leche de la que necesitan, podrían correr el riesgo de generarles problemas de salud.

¿Cuáles son los riesgos de beber demasiada leche?

Si tu pequeño depende demasiado de la leche, puede correr el riesgo de tener poco apetito, niveles bajos de hierro o incluso estreñimiento.

Falta de apetito: no es difícil que la leche llene un pequeño estómago. Beber leche más allá de las recomendaciones puede provocar falta de apetito. La leche puede desplazar las oportunidades de obtener nutrientes de frutas, verduras, cereales y proteínas. Es posible que tu pequeño beba leche demasiado cerca de la hora de comer e ignore su plato. Conserva la leche solo para las comidas. Entre comidas, ofrécele agua para estimular su apetito.

Niveles bajos de hierro: Beber mucha leche aporta mucho calcio al cuerpo... pero puede reducir los niveles de hierro de tu hijo. El exceso de calcio en el cuerpo compite con la capacidad del cuerpo para absorber el hierro de los alimentos. Los niveles normales de hierro son esenciales para la salud y el desarrollo cerebral de tu hijo.

Estreñimiento: según la investigación, aún no se conoce el veredicto sobre si la leche de vaca causa estreñimiento. Seguir las cantidades recomendadas de leche puede reducir las posibilidades de estreñimiento. Si tu hijo tiene problemas para defecar, podría ser una alergia a la leche de vaca. Habla con tu pediatra si tienes alguna inquietud.

¿Puedo darle leche vegetal a mi niño pequeño?

Si tu hijo tiene alergia a la leche de vaca, es posible que te preguntes qué tipo de leche es la mejor para él. Decidir qué leche alternativa es mejor para tu niño debe ser una elección cuidadosa porque no todas las leches ofrecen los mismos beneficios nutricionales. La leche de origen vegetal o no lácteo proviene de fuentes como la soya, el arroz, el cáñamo, las almendras, los chícharos y la avena. Algunos están fortificados con los nutrientes que se encuentran en la leche de vaca, pero muchos son bajos en calorías, proteínas y vitamina D.

Proporcionar leche no láctea con cantidades bajas de nutrientes puede obstaculizar el crecimiento y el desarrollo saludable de los niños pequeños. La leche de origen vegetal no es nutritiva para los niños menores de 1 año, así que evítala hasta el primer cumpleaños de tu hijo.

Y en general, a menos que exista una necesidad médica o dietética de leche de origen vegetal, no se recomienda ofrecer leche de origen vegetal a los niños pequeños. Por supuesto, si tu hijo no puede beber leche de vaca, no hay necesidad de preocuparse porque hay leches que se adaptan a sus necesidades.

¿Cuál es la mejor leche vegetal para niños pequeños?

Las Guías Alimentarias para los Estadounidenses dicen que la leche de soya es la única leche que se considera un equivalente lácteo. Es una leche segura para dar a los niños a partir de la edad de 1 año. Considera ofrecerle a tu hijo leche de soya sin azúcar para evitar los azúcares agregados. Si tu hijo es alérgico a los productos de soya, es mejor consultar con un nutriólogo o doctor para determinar cuál es su siguiente mejor opción de leche.

¿Puedo darle a mi niño fórmula para niños pequeños?

Las fórmulas para niños pequeños se comercializan para familias de niños pequeños entre las edades de 1 y 3 años. Aunque afirman que proporcionan la nutrición que los niños pequeños necesitan, a menudo están llenas de azúcares añadidos. Las fórmulas para niños pequeños no son necesarias para la salud de tu hijo y pueden afectar significativamente tu billetera. La Academia Estadounidense de Pediatría recomienda evitar la fórmula para niños pequeños.

Fuentes alternativas de calcio para niños pequeños

Tal vez a tu hijo pequeño no le guste beber leche; para estos niños, hay otras fuentes de calcio como:

Fuentes lácteas de calcio para niños pequeños

Yogur

Queso

Queso cottage

Pudín

Fuentes de calcio no lácteas para niños pequeños

Pescado

Verduras de hojas verdes oscuras

Brócoli

Cereal fortificado

Tofu

Jugo de naranja fortificado

Frijol blanco

Soya

Higos secos